*Durante el operativo de Fin de Año se logró la detención de dos sujetos por portación de arma de fuego, y la recuperación de otra arma, que otro sujeto arrojó al suelo para luego huir
Culiacán, Sinaloa.- El gobernador Rubén Rocha Moya lamentó el deceso del niño Jared, de tan sólo cinco años de edad, quien falleció las primeras horas del domingo luego de resultar herido por una bala perdida que se le alojó en la cabeza, mientras se encontraba con su familia festejando el Año Nuevo en un domicilio de Culiacán.
Desde su Conferencia Semanera, la primera de este año, el mandatario estatal expresó su pesar por este lamentable hecho, que vino a enlutar a familia, producto de esta mala costumbre de disparar armas de fuego al aire para recibir un nuevo año, no obstante las campañas de concientización que difundió el Gobierno del Estado en todos los medios de comunicación y redes sociales.
De igual manera, lamentó que además del deceso el niño Jared Guadalupe, se registró otro caso de un niño que resultó herido en la espalda también por una bala perdida, quien se encuentra internado en un hospital, al igual que tres adultos más, para hacer un total de cinco lesionados por esta mala práctica.
“Empiezo por expresar mi pesar por el fallecimiento de Jared Guadalupe, un niño que recibió una bala perdida, y les expreso mis condolencias a la familia, los estamos atendiendo, y a los que están lesionados por la misma causa, por una bala perdida, derivado de los hechos, de esta mala, mala tradición de disparar al aire de quienes lo hicieron a pesar de nuestras campañas que intensificamos en los días previos al 31, para que no dispararan al aire porque es peligroso, esos son los resultados más lamentables”, precisó.
A su vez, el secretario de Seguridad Pública, Cristóbal Castañeda Camarillo, dio a conocer que se recibieron un total de 47 llamadas al 911 para reportar disparos al aire durante la noche del 31 de diciembre y primeros minutos del 1 de enero en todo el estado.
Como parte del operativo, se logró la detención de dos sujetos por portación de arma de fuego, y la recuperación de otra arma, que otro sujeto arrojó al suelo para luego darse la fuga al percatarse de la presencia de policías.