Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública durante el sexenio de Felipe Calderón, ha sido condenado a casi 40 años de prisión en Estados Unidos tras ser hallado culpable de colaborar con el Cártel de Sinaloa. El juez Brian Cogan dictó una sentencia de 460 meses (38 años y cuatro meses) y una multa de dos millones de dólares. Además, García Luna enfrentará cinco años de libertad supervisada tras cumplir su condena.
Durante la audiencia en la corte de Brooklyn, el juez Cogan señaló: «Usted se engañó a sí mismo creyendo que respetaba la ley. Tiene la misma mentalidad nublada que ‘El Chapo'». A pesar de que la Fiscalía solicitó cadena perpetua, la defensa de García Luna abogó por una condena mínima de 20 años, y finalmente se optó por un término intermedio. «Le daré una luz al final del túnel», comentó el juez.
García Luna, quien estaba visiblemente serio pero no cabizbajo, asistió a la audiencia vestido de traje y utilizó un aparato para la traducción simultánea. Esta sentencia lo convierte en el exfuncionario mexicano de mayor rango condenado en Estados Unidos por sus vínculos con el narcotráfico.
Culpable de proteger al Cártel de Sinaloa
El exfuncionario, de 56 años, fue encontrado culpable de recibir sobornos millonarios del Cártel de Sinaloa, liderado por Joaquín «El Chapo» Guzmán, a cambio de facilitar el envío de drogas a Estados Unidos entre 2001 y 2012. En febrero de 2023, un jurado lo declaró culpable de varios cargos, entre ellos, participar en una empresa criminal, conspirar para distribuir y poseer cocaína, y falsedad documental. Según la Fiscalía, García Luna «explotó su poder y autoridad aceptando millones de dólares en sobornos de una organización a la que juró combatir». Además, se le acusó de proteger al menos seis cargamentos de droga que sumaban 53 toneladas entre 2002 y 2008.
Entre los testigos que declararon en su contra se encontraban miembros prominentes del Cártel de Sinaloa, como Jesús «Rey» Zambada y Sergio Villarreal «El Grande», quienes aseguraron haber pagado sobornos a cambio de protección.
La defensa de García Luna
A lo largo del proceso, García Luna mantuvo su inocencia y argumentó que la Fiscalía se basó en «información falsa proporcionada por el gobierno de México» y en testimonios de testigos con antecedentes criminales. En una carta escrita en septiembre, el exfuncionario afirmó que no se presentó ninguna prueba concluyente en su contra. A pesar de la sentencia, García Luna ha anunciado que apelará el fallo y agotará todos los recursos legales.
Celebración en Estados Unidos
Agencias como la DEA y la Fiscalía de Estados Unidos celebraron la sentencia. Breon Peace, Fiscal Federal, afirmó que el castigo es un «paso fundamental» para defender el Estado de Derecho, ya que García Luna facilitó la importación de más de un millón de kilogramos de narcóticos a Estados Unidos. Anne Milgram, administradora de la DEA, subrayó que la sentencia envía un mensaje contundente a los líderes corruptos de todo el mundo: «Ninguna cantidad de poder los protegerá de la justicia».